diciembre 12, 2022

by grupo76

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Cómo hacer el huevo frito perfecto

¿Sabes freír un huevo? Seguro que sí, pero ¿te sale perfecto? Con puntilla, con la clara cuajada y la yema líquida, así es el huevo frito perfecto para los paladares más expertos. Y aquí te contamos cómo hacerlo.

No te preocupes, no necesitas ser un experto cocinero ni tampoco tener ningún utensilio especial. Solo necesitas sartén, aceite de oliva, sal y, por supuesto, un huevo fresco y de calidad (como los de Demillo). Entonces, ¿dónde está el truco? Fundamentalmente en la cantidad, el tipo y la temperatura del aceite, que debe estar muy caliente, aunque sin llegar a humear. 

Aquí van los pasos:

• Pon aceite de oliva (preferiblemente suave) en una sartén. El aceite de oliva es el perfecto para alcanzar la temperatura correcta, que debe ser de unos 180 grados. La cantidad debe ser la suficiente para cubrir todo el fondo de la sartén y para que la clara del huevo quede cubierta (aproximadamente 1 o 2 centímetros).
• Deja que el aceite alcance la temperatura (como comentamos antes, muy caliente pero sin llegar a humear)
• Casca el huevo en un recipiente (en un plato o en un tazón). También podrías hacerlo directamente sobre la sartén, pero así evitas que puedan mezclarse restos de cáscara.
• Vierte el huevo en el centro de la sartén y deja que se haga.
• Cuando la puntilla ya se esté formando y la parte superior de la clara siga transparente, utiliza una cuchara o una espátula para esparcir aceite sobre la clara que aún no se ha cuajado, pero evitando que caiga sobre la yema para que no se pase y se cuaje.
• Cuando toda la parte blanca del huevo esté cuajada, retira el huevo de la sartén con una espátula.
• Añade sal sobre la yema… ¡y a disfrutar de tu huevo frito perfecto!